El empresario japonés Osamu Suzuki decide dejar el mando a los 91 años. A lo largo de su mandato, Osamu logró transformar Suzuki en una de las mayores casas automotrices del mundo. En los tres primeros trimestres de 2020 el grupo facturó por valor de 16.800 millones de euros y logró beneficios de 876 millones de euros. El 90,4% de los ingresos procedieron de la venta de coches, la división de motocicletas aportó el 6,6% y las embarcaciones el 3%.