Comparativas
A mediados de los años 80, el duelo entre las cuatro grandes marcas japonesas estaba servido. Se empezaba la lucha por el despliegue de tecnología y prestaciones. En este comparativo se enfrentan las dos últimas novedades de 1985 con mayor tecnología que eran la Honda VF500FII y la Kawasaki Gpz600R, una declaración de intenciones frente a las "veteranas" no por ello menos sofisticadas Suzuki GSX550ES, Yamaha XJ 600 y Yamaha RD 350, esta última con motor 2t. Cualquiera de ellas era el sueño de cualquier adolescente que cumplía los 18 años y ansiaba por sacarse el carnet A2 (en aquel entonces no existía el actual "A"). Eso si la Gpz 600R y la Honda VF 500FII no eran aptas para todos los bolsillos, pues en aquel entonces rondaban el millón de pesetas (6.000€ que con la inflación actual podría significar el doble hoy en día). La Suzuki y ambas Yamahas eran alternativas más lógicas.
Todos los detalles en el artículo adjunto de la revista Motociclismo número 913 de 1985.
A finales del Siglo XX, en la década los 90, los fabricantes japoneses de motocicletas compitieron en una carrera tecnológica en la que cada marca luchaba por una ventaja en lo que se conoció como la "guerra de la velocidad". Esto dio lugar a una serie de nuevos modelos con velocidades máximas cada vez mayores, en un intento por conseguir el título de la motocicleta de producción más rápida del mundo. La ZZR 1100 de Kawasaki que nació en 1990 reinó durante un tiempo, hasta que Honda lanzó al mercado en 1997 su CBR1100XX, también conocida como Blackbird. Para destronar a la CBR, Suzuki empezó a desarrollar un nuevo modelo de mayor cilindrada. Justo antes del cambio de milenio, en 1999 Suzuki lanzó la GSX-1300R, o Hayabusa (隼).
A continuación tienes la comparativa de las tres motos más rápidas de la década de los 90 publicado en la revista Solo Moto 30 número 194 de 1999. Os presentamos las tres rivales: Suzuki GSX 1300 R Hayabusa, Honda CBR 1100 XX Fireblade y Kawasaki ZZR 1100. El duelo está servido.
Honda ha sido de las pocas marcas de motocicletas que se ha permitido de tener la competencia en su propia casa. Aunque esta comparativa no carezca de lógica, en el fondo si la tiene. La firma del ala dorada lanzó en 1983 la revolucionaria VF 750 F, que aunque tecnologicamente podríamos decir que era la más avanzada del mercado, su desarrollo prematuro y compleja tecnología puso en aprietos a este precioso modelo debido a sus problemas técnicos. La Honda VF 750 F era una motocicleta cara no solo por su tecnología sino por su elevada calidad (motor V4 refrigerado por agua y 16v, chasis de sección rectangular, llantas Comstar, etc.), lo que no podía permitirse ser un fracaso comercial. Debido a los problemas de lubricación en las culatas, refrigeración y algún detalle más, Honda tuvo que reaccionar rápido mientras evolucionaba la sustituta (futura VFR 750 F del 86), por lo que decidió lanzar al mercado una sustituta de la VF750F. Nace en 1984 la CBX750F con un mismo concepto pero con un planteamiento diferente. La CBX destaca por su precioso frontal de 2 faros cuadrados (estilo Seat 1430), motor tetracilíndrico en línea refrigerado por aire y chasis convencional. Ambas comparten medidas de ruedas y neumáticos con una llanta de 18" detrás y 16" delante, aunque la CBX era más neutral y no tenía esas incomodas reacciones de enderezarse delante cuando frenabas. Las potencias y velocidades puntas eran similares rondando los 90cv. Cabe destacar el sistema hidráulico de reglaje de válvulas de la CBX750.
Curiosidades de la vida, y aunque la CBX750 en terminos generales era una moto más sencilla que la VF750F, no solo era más fiable sino que tenía un comportamiento mejor.
Puedes conocer todos los detalles en la comparativa publicada por la revista Motociclismo número 841 de 1984.
A mediados de los ochenta, las firmas japonesas competían entre si constantemente, y ante la fiebre de motos deportivas por parte de los usuarios, estos decidieron sacar al mercado motocicletas "réplicas" de las motos del mundial de 500. Yamaha fue la primera marca en sacar su preciosa RD 500 LC con 4 cilindros refrigerado por agua y 90 cv de potencia. Suzuki y Honda reaccionaron al poco tiempo fabricando sus RG500 Gamma y NS400R. En 1985 solo unos pocos privilegiados podían comprar estas motos y emular a Kenny Roberts con su Yamaha RD500LC, Barry Sheene con la Suzuki o Freddie Spencer con la Honda. Para colmo estas preciosidades nunca llegaron a nuestro país de manera oficial, pues los importadores no veían mercado para ellas, al margen de los cupos y aranceles elevados. Es cierto que existían importadores "paralelos" y gracias a ellos algunas unidades pudieron llegar a nuestro país.
Las tres motocicletas de este comprativo son motos clásicas y de colección con un valor al alza, superando en el mercado de ocasión los 10.000€ por modelo si se encuentran en estado original.
La gran duda, entre estas tres maravillas, surge cuando dudas entre la belleza, pasión y brutalidad de la Yamaha RD500LC, la sofisticación y prestaciones de la Suzuki RG500 Gamma o el equilibrio y finura de la Honda NS400R. Quizás estas dudas te lo resuelvan el artículo publicado por la revista Motociclismo número 918 de 1985 que puedes descargarte a continuación
A mediados de los ochenta antes de la llegada de las populares 600cc, la moto "perfecta" era la 750, que era el equilibrio perfecto entre una 500cc y una 1000cc. Las 750cc japonesas de los 80 ya empezaban a ser tecnologicamente más sofisticadas que las motocicletas europeas, con unas mayores prestaciones, mayor suavidad de funcionamiento y más fiables.
En este caso la revista Motociclismo número 863 de 1984 comparó la recién llegada Honda VF750F con su novedoso motor V4 de 16 válvulas refrigerado por agua y 90 cv de potencia contra su hermana Honda CBX 750F (más novedosa todavía en cuanto a lanzamiento al mercado) y la "veterana" Suzuki GSX750ES. Tres conceptos similares aunque muy diferentes entre ellas. No te pierdas las impresiones del reportaje de la época publicado por el periodista y piloto Augusto Moreno de Carlos.