La Suzuki GS500 fue la primera moto grande o moto escuela de un gran número de usuarios en España. Era la moto deseada e ideal para aquellos motoristas que se sacaban el carné A2 (antiguamente no existía el “A”. Del A1 pasabas directamente al A2).
A finales de los años ochenta, concretamente en 1989 Suzuki sustituye su veterana GS450 heredada de la GS400 y crea una moto mucho más moderna y dinámica aunque con finalidad funcional. Su estética era atractiva y siguiendo los cánones actuales con llantas de 17” y neumáticos anchos para la época. Su chasis de doble cuna rectangular le otorgaba una gran personalidad. El motor bicilíndrico refrigerado por aire y 4 válvulas por cilindro era la base del GS450 pero subido de cilindrada y con una potencia de 52cv a 9.200 rpm. Era un motor elástico y fiable con algo de estirada en su parte alta de revoluciones.
Gracias a su funcionalidad, estética, peso, altura reducida y precio competitivo, la Suzuki GS 500 se convirtió enseguida en una moto líder de ventas en nuestro país. Fue tal el éxito que se llegó a producir en las instalaciones de Suzuki España en Gijón durante mediados de los años noventa hasta el año 2007 con varios restylings a lo largo de su vida comercial, incluso una versión completamente carenada. Las exigentes normativas europeas de medio ambiente, hicieron que este veterano motor con carburadores no pudiera pasar la normativa Euro 3, por lo que finalmente se descatalogó, aunque siguió vendiéndose en otros mercados fuera de Europa.
Fue tan grande el parque móvil de esta pequeña gran moto, que hoy en día todavía pueden verse muchas unidades en nuestras ciudades y carreteras, algunas de ellas incluso gozando de buena salud.
A continuación puedes descargar y leer la prueba por Jordi Aymamí publicada en la revista Solo Moto número 2055.