Si no recuerdo mal, Cagiva compró la mítica y fallida marca italiana Morini en 1987 que tanto éxito tuvo en el mercado europeo a finales de los años setenta. Morini a igual que muchos fabricantes españoles como Sanglas o Bultaco se quedaron desfasados con la llegada de modelos japoneses a principios de los años 80.
En este caso Cagiva que también había adquirido Ducati unos años atrás, quería pretendía dar un aire fresco a las vetustas Morini pero sin invertir en elevados costes.
Aprovechando el éxito de la Cagiva Freccia C9 de Massimo Tamburini creador de la Ducati Paso 750, Cagiva optó por montar el veterano motor bicilíndrico en “V de 344cc de 4 tiempos y dos válvulas por cilindro” refrigerado por aire de 1973, y adaptarlo al chasis Deltabox de la Freccia y vestirla con la misma estética tipo “aéreo”.
Nace en 1988 la Morini Dart 400 que en realidad era 350 (aunque es cierto que para el mercado japonés si hubo una versión 400). La idea era buena, y aunque la moto tenía un diseño espectacular y una buena parte ciclo para el modesto y veterano motor, no tuvo la aceptación adecuada en el mercado europeo, en parte debido a sus escasos 35 CV en una época en la que predominaban las potentes motos japonesas, mucho más modernas y con mayor tecnología a un precio similar. No obstante, el ligero peso de 150 kgs., permitía a la Morini Dart llegar a unos interesantes 170 km/h.
Cagiva tenía en mente nuevas ideas para Morini con motores más potentes, pero por desgracia, Cagiva no tuvo liquidez suficiente para desarrollar futuros proyectos y la Dart se mantuvo solo tres años en el mercado con una producción de solo 1.000 unidades.
Creemos que podría ser una interesante moto clásica para aquellos coleccionistas que les gustan las “rara avis”.
A continuación, puedes descargar y leer todos los detalles de este modelo publicado en la revista Motociclismo número 1070 de 1988.