Marcas y modelos
En 1985 Ducati pasa al accionariado del Grupo Cagiva, por lo que había que demostrar al mercado una renovación de diseño en los nuevos modelos. La primera nacida de la unión Ducati - Cagiva es la Paso, diseñada por Massimo Tamburini, uno de los fundadores de Bimota creando la DB1 la primera Bimota con motor Ducati. En 1986 Ducati presentó la revolucionaria 750 Paso tomando como base muchas soluciones y piezas de la DB1 como motor, suspensión delantera Marzocchi, etc. Lo atractivo de la Ducati Paso son sus líneas aerodinámicas extremadamente perfiladas. La carroceria "aereo" que cubría completamente el motor y chasis, fue copiada más adelante por motocicletas tan populares como la Honda CBR 600 F. Otras de sus señas de identidad son la cúpula opoca, retrovisores integrados al carenado.
El nombre Paso es en honor al piloto italiano Renzo Pasolini, que falleció en un trágico accidente durante el Gran Premio de Monza de 1973.
La moto debuta en la Feria de Milán de 1985 en la versión 750 roja y llegará al mercado al año siguiente. Las Paso blancas y azules pertenecen a la edición limitada destinada al mercado estadounidense. Con la Paso 750, la cúpula transparente desaparece mientras que vuelve el chasis multitubular, característica que distingue a todas las motos producidas de allí en adelante por la casa boloñesa, con un tubo de forma inusual, cuadrado en lugar de cilíndrico.
El motor de 4 tiempos de 750cc, bicilíndrico en "L", la lubricación de cárter húmedo con radiador del aceite, y distribución por correas, provenía de su hermana la Pantah ofreciendo 73 CV a 7.900 r.p.m. y par máximo de 7.6 kg a 6.300 rpm. Las prestaciones sorprendentes para una bicilíndrica, el encendido electrónico y la alimentación con carburador de doble cuerpo Weber son todos factores que caracterizan la moto de Borgo Panigale. La Paso venía equipada con unos Pirelli MP-7 S radiales o bien los Michelín 59 x radiales siendo estos neumáticos de perfil súper bajo para su época (160/60 x 16 detrás y 130/60 x 16 delante).
Aunque no fue un modelo muy comercial en ventas si que lo fue en cuanto a diseño revolucionario, y a pesar de su fama en cuanto a su delicada fiabilidad sobre todo lo que respecta a la instalación eléctrica, está demostrado que si la unidad en cuestión está bien cuidada y mantenida puede dar muchas satisfacciones hoy en día como nos demuestra Jaime Valls propietario de una unidad durante muchos años y que podrás ver la prueba en nuestro canal de YouTube.
Creemos que si encuentras un buen ejemplar, vale la pena como inversión futura de moto clásica, puesto que hoy en día se pueden encontrar a precios económicos.
A continuación puedes leer la prueba publicada por Augusto Moreno de Carlos en la revista Motociclismo nº 1.014 del año 1987