En la década de los 70, donde en España reinaban los ciclomotores, pues se podían llevar sin disponer carné de conducir, no había gran mercado de ciclomotor campero. Destacaban los ciclomotores útiles y polivalentes, tipo Vespino, Mobylette, GAC y por ultimo las Derbi Variant, pero la clientela joven buscaba algo más radical y atractivo.
A finales de los 70 Derbi saca al mercado la Diablo C4 con 4 marchas y una estética de todo terreno gracias a sus ruedas mixtas, colores y sobre todo escape tipo bufanda que le daba un “look” muy deportivo. No obstante la legislación española obligaba a los fabricantes a “capar” los ciclomotores que siendo de 49cc, no podían exceder de 2cv ni de 45 km/h, además de la absurda necesidad de llevar pedales tipo bicicleta.
Los jóvenes lograban extraer más potencia a sus Diablo cambiando el pequeño carburador de 12mm de diámetro de difusor por uno mayor de 18mm, cambiaban desarrollo por uno más largo para obtener mayor velocidad punta, el silenciador final era sustituido por uno más abierto y aquellos que no se conformaban con este incremento de prestaciones le instalaban un cilindro y pistón de 65cc de la industria auxiliar. La C4 Diablo acabó renovándose a principios de los 80 con la nueva Derbi C7 con una base similar, pero puesta al día.
A continuación puedes descargar y leer la prueba publicada en la revista Solo Moto número 176 de 1979.