Marcas y modelos
A mediados de los años ochenta cuando España ya entraba en la CEE (Comunidad económica europea), por fin se empezaban a liberalizar los cupos de importación. No obstante las marcas españolas tenían que llegar a un acuerdo con marcas extranjeras (fuera de Europa) para poder conseguir mayor número de importaciones.
Puch aunque era una marca austriaca, llegó a un acuerdo con Avelló en los años 70, para poder fabricar motocicletas en Gijón bajo licencia Puch. A mediados de los 80, Puch Avelló llegó a un acuerdo con Suzuki y uno de los primeros scooters que se empezó a importar para posteriormente fabricar en Gijón bajo regimen SKD fue la Lido Vario 75.
Básicamente la Lido Vario era una Suzuki con nombre Puch. Cuando a principios de los 80 la reina de los scooters era la Vespa primavera 75 con sus ventajas y defectos, Puch supo detectar las carencias de la Vespa, sacando al mercado un modelo mucho más práctico y ergonómico.
Las ventajas de la Lido Vario, eran varias, entre ellas su transmisión automática (a diferencia de las 4 velocidades manual de la Vespa), arranque eléctrico, carrocería en plásico ABS (mucho más ligera y económica), aceite 2t por engrase separado y un tablier de instrumentos muy completo para su época. Lo mejor de todo, su brioso motor carente de vibraciones y fiable, además de una manejabilidad asombrosa gracias a sus pequeñas ruedas de 10 pulgadas.
El reinado de la Lido Vario 75, duró poco porque al poco tiempo Honda lanzó al mercado su Scoopy 80, para posteriormente convertirse en 75cc para los usuarios del carnet A1, y gracias a sus ruedas de 16 pulgadas ofrecía un scooter mucho más estable y seguro. No obstante se seguío fabricando unos cuantos años más, e incluso llegaron a lanzar una versión de 50cc.
A continuación puedes descargar y leer el artículo de la revista Motociclismo número 911 de 1985.