Marcas y modelos
Después del exito de la Puch Cobra MC 75, la marca austriaca tenía que evolucionar para satisfacer la demanda de sus clientes y no quedarse desfasada frente a la competencia. En 1982 nace la Puch Cobra M82 con una estética mucho más moderna y agresiva.
M82, cuyo nombre quiere decir «Réplica Monjonell, año 82». De este modelo se fabricaron dos versiones de enduro (hubo una tercera para cross): una «estándar», más económica y con motor refrigerado por aire, y las versiones «TT» (todo terreno) con más potencia y mejor preparadas para esas carreras de TT, sin perder la polivalencia que las caracterizaba. Esta versión era el sueño de todos los adolescentes de 16 años con su recién sacada carné A1.
Ya a mediados de los ochenta, Montesa con su Enduro 80H7 y con la llegada de la Rieju Marathon 74, Puch lanzó al mercado la última de la ultima versión TT, siendo esta versión de agua y freno de disco delantero con sus 19 CV declarados una de las 75 más potentes disponibles en España, hasta que Rieju lanzó al mercado su versión más potente de la MR80, que en breve compararemos en nuestro canal de Youtube.
Hoy en día la Puch Cobra sobre todo la versión de agua, es una gran preciada moto clásica de enduro y con un valor al alza, dificil de encontrar.
A continuación puedes descargar y leer la pruebas de la versión de cross y enduro publicada en la revista Motociclismo número 748 de 1982 y número 820 de 1983.
A finales de los años 70 cuando los fabricantes de motocicletas españoles debían satisfacer las necesidades de los adolescentes que poseían el carné A1 (antiguamente la cilindrada máxima permitida era de 75cc), empezaron a crear una nueva gama de modelos de carretera partiendo de la base de sus modelos de todo terreno.
Las primeras marcas fueron Montesa y Bultaco, en la que Montesa cogía la base de su Enduro 75L (chasis y motor) y creo la Crono 75 (también disponible en 125) con la que se potenció con la revista Solo Moto dando la vuelta a España con 5 unidades. En esta misma web tienes el reportaje de Solo Moto llamado “Operación Crono” con todos los detalles.
Bultaco disponía de la Frontera 74 y con ella nació la Streaker 74, pero solo aprovechaba el motor y poco más, ya que el revolucionario chasis de la Streaker nada tenía que ver con el de la Frontera.
En 1979 Avelló en Gijón con licencia Puch quería subirse al carro realizando la misma jugada. Básicamente se traían las piezas de Austria y se montaban en España. El motor era el fiable y potente de la Cobra TT pero con el desarrollo cambiado y ligeros retoques, y con una estética de carretera. Las suspensiones son nuevas específicas para un modelo de carretera y la trasera regulable. Las llantas de aleación perforadas nos recuerdan a la Montesa Crono 75.
Lo mejor de este modelo su peso de solo 81 kgs junto a la potencia de su motor puntiagudo hacían de ella una moto muy divertida poniendo en jaque mate a sus competidoras. Su estética era algo sobria en comparación con la Bultaco y Montesa pero sus acabados eran buenos.
No sabemos el porque se vendió poco en nuestro país, quizás por producción limitada, estética con poca personalidad o bien porque llegó tarde al mercado. En 1981 Derbi también optó por la misma fórmula introduciendo al mercado la Derbi Sport Coppa 74 con el mismo motor que su TT8, y con una estética más acorde a los años 80.
En esta misma web en el menú de "comparativas" podrás leer la comparativa entre este modelo contra la Derbi 1001, Bultaco Streaker 74 y Montesa Crono 75.
A continuación puedes descargar y leer la prueba publicada en la revista Solo Moto número 216 de 1979
Sanglas es una marca de motocicletas nacional cuya historia se remonta a 1942, tres años después de la Guerra Civil Española, pero las primeras ventas de motocicletas comienzan en 1947. La compañía fue fundada por dos jóvenes estudiantes de ingeniería de Barcelona, los hermanos Javier y Martín Sanglas con el apoyo financiero de su padre, industrial textil con el fin de crear una industria nacional de motocicletas.
La idea de los hermanos Sanglas fue fabricar una motocicleta de gran cilindrada para poder suministrar a los Organismos Oficiales como alternativa a las BMW, Zündapp y DKW. Después de un buen periodo de ensayos y más de 50.000 kilómetros recorridos las entregas a nivel formal comienzan en 1947 y en diciembre de 1948 han alcanzado las 200 unidades. En estos momentos Sanglas tiene una plantilla de 100 trabajadores y una planta de producción de 12.000 metros cuadrados donde contaba con todas las secciones necesarias para fabricar motocicletas, y todos sus componentes.
Los modelos de Sanglas siempre se han caracterizado por llevar un motor de 4 tiempos monocilíndrico, de tipo OHV inspirado en la casa DKW. La primera motocicleta tenía una cilindrada de 347,7cc y 14,4 CV de potencia a 4.800 rpm.
En 1958 la producción asciende a 500 unidades anuales, lo que conlleva ampliar la producción con el subsiguiente traslado de la misma de Pueblo Nuevo a una fábrica más moderna situada en Hospitalet de Llobregat. Durante la crisis de aquellos años se redujo la plantilla de 200 a 50 convirtiendo gran parte de los trabajadores en proveedores y exteriorizando algunos componentes, por ejemplo dotando a la nueva Sanglas 400 con motores Hispano Villiers bajo la marca Rovena.
Durante la vida comercial de Sanglas, los modelos más conocidos han sido las diferentes versiones de la 400cc. La primera versión “T” se comercializó entre 1964 y 1973, la segunda “T lujo” entre 1971 y 1973. Posteriormente apareció la “E” (1973-1976), y la “F” (1976-1980) fue la última 400 monocilíndrica. Existió una “400Y”, pero fue una versión que nació en 1979 con motor bicilíndrico Yamaha y 37cv que mejoraban las prestaciones de la monocilíndrica 500S (1976-1978) La 500S destaca por la incorporación de frenos de disco internos (inventados por Sanglas) y 32 CV a 6.700 rpm. Aprovechando el lanzamiento de la 500 S se modificaba la 400E presentando la 400 F con sensibles mejoras a nivel mecánico y de compresión para usar gasolina de 85 octanos, así como abandonar la dinamo en favor de un alternador, y otros aspectos como mandos,...
En 1977, se lanza la 500 S2 y Javier Sanglas se desplaza a Japón y alcanza un acuerdo con Yamaha para importar 3.000 motores bicilíndricos de 400 cc., si bien el gobierno obligó a cambio a que se exportaran un buen número de motocicletas. En 1979 Sanglas vende 3.000 motos equipadas con el motor de origen nipón.
La 500 S2 fue especialmente mimada por los Sanglas gracias a la experiencia adquirida de todos sus años anteriores, incorporando lo mejor que la industria auxiliar aportaba. En 1979 se presenta la versión de cinco velocidades (500 S2 V5), siendo este el último modelo comercial fabricado por Sanglas. A principios de los años ochenta, empezó el “boom” y liberalización de las motos japonesas, y Sanglas ya no pudo competir con ellas. Existió también un prototipo monocilíndrico de 750cc, pero por falta de presupuesto nunca vio la luz en el mercado.
La moto que os presentamos en este artículo es la Sanglas 400 F, la última versión de la monocilindrica de 400 con todas las mejoras pertinentes en motor y bastidor. A continuación puedes leer la prueba de Jaime Alguersuari publicada en la revista Solo Moto nº 77 de 1977.
A mediados de los años ochenta cuando España ya entraba en la CEE (Comunidad económica europea), por fin se empezaban a liberalizar los cupos de importación. No obstante las marcas españolas tenían que llegar a un acuerdo con marcas extranjeras (fuera de Europa) para poder conseguir mayor número de importaciones.
Puch aunque era una marca austriaca, llegó a un acuerdo con Avelló en los años 70, para poder fabricar motocicletas en Gijón bajo licencia Puch. A mediados de los 80, Puch Avelló llegó a un acuerdo con Suzuki y uno de los primeros scooters que se empezó a importar para posteriormente fabricar en Gijón bajo regimen SKD fue la Lido Vario 75.
Básicamente la Lido Vario era una Suzuki con nombre Puch. Cuando a principios de los 80 la reina de los scooters era la Vespa primavera 75 con sus ventajas y defectos, Puch supo detectar las carencias de la Vespa, sacando al mercado un modelo mucho más práctico y ergonómico.
Las ventajas de la Lido Vario, eran varias, entre ellas su transmisión automática (a diferencia de las 4 velocidades manual de la Vespa), arranque eléctrico, carrocería en plásico ABS (mucho más ligera y económica), aceite 2t por engrase separado y un tablier de instrumentos muy completo para su época. Lo mejor de todo, su brioso motor carente de vibraciones y fiable, además de una manejabilidad asombrosa gracias a sus pequeñas ruedas de 10 pulgadas.
El reinado de la Lido Vario 75, duró poco porque al poco tiempo Honda lanzó al mercado su Scoopy 80, para posteriormente convertirse en 75cc para los usuarios del carnet A1, y gracias a sus ruedas de 16 pulgadas ofrecía un scooter mucho más estable y seguro. No obstante se seguío fabricando unos cuantos años más, e incluso llegaron a lanzar una versión de 50cc.
A continuación puedes descargar y leer el artículo de la revista Motociclismo número 911 de 1985.
Sanglas es una marca de motocicletas nacional cuya historia se remonta a 1942, tres años después de la Guerra Civil Española, pero las primeras ventas de motocicletas comienzan en 1947. La compañía fue fundada por dos jóvenes estudiantes de ingeniería de Barcelona, los hermanos Javier y Martín Sanglas con el apoyo financiero de su padre, industrial textil con el fin de crear una industria nacional de motocicletas.
La idea de los hermanos Sanglas fue fabricar una motocicleta de gran cilindrada para poder suministrar a los Organismos Oficiales como alternativa a las BMW, Zündapp y DKW. Después de un buen periodo de ensayos y más de 50.000 kilómetros recorridos las entregas a nivel formal comienzan en 1947 y en diciembre de 1948 han alcanzado las 200 unidades. En estos momentos Sanglas tiene una plantilla de 100 trabajadores y una planta de producción de 12.000 metros cuadrados donde contaba con todas las secciones necesarias para fabricar motocicletas, y todos sus componentes.
Los modelos de Sanglas siempre se han caracterizado por llevar un motor de 4 tiempos monocilíndrico, de tipo OHV inspirado en la casa DKW. La primera motocicleta tenía una cilindrada de 347,7cc y 14,4 CV de potencia a 4.800 rpm.
En 1958 la producción asciende a 500 unidades anuales, lo que conlleva ampliar la producción con el subsiguiente traslado de la misma de Pueblo Nuevo a una fábrica más moderna situada en Hospitalet de Llobregat. Durante la crisis de aquellos años se redujo la plantilla de 200 a 50 convirtiendo gran parte de los trabajadores en proveedores y exteriorizando algunos componentes, por ejemplo dotando a la nueva Sanglas 400 con motores Hispano Villiers bajo la marca Rovena.
Durante la vida comercial de Sanglas, los modelos más conocidos han sido las diferentes versiones de la 400cc. La primera versión “T” se comercializó entre 1964 y 1973, la segunda “T lujo” entre 1971 y 1973. Posteriormente apareció la “E” (1973-1976), y la “F” (1976-1980) fue la última 400 monocilíndrica. Existió una “400Y”, pero fue una versión que nació en 1979 con motor bicilíndrico Yamaha y 37cv que mejoraban las prestaciones de la monocilíndrica 500S (1976-1978) La 500S destaca por la incorporación de frenos de disco internos (inventados por Sanglas) y 32 CV a 6.700 rpm. Aprovechando el lanzamiento de la 500 S se modificaba la 400E presentando la 400 F con sensibles mejoras a nivel mecánico y de compresión para usar gasolina de 85 octanos, así como abandonar la dinamo en favor de un alternador, y otros aspectos como mandos,...
En 1977, se lanza la 500 S2 y Javier Sanglas se desplaza a Japón y alcanza un acuerdo con Yamaha para importar 3.000 motores bicilíndricos de 400 cc., si bien el gobierno obligó a cambio a que se exportaran un buen número de motocicletas. En 1979 Sanglas vende 3.000 motos equipadas con el motor de origen nipón.
La 500 S2 fue especialmente mimada por los Sanglas gracias a la experiencia adquirida de todos sus años anteriores, incorporando lo mejor que la industria auxiliar aportaba. En 1979 se presenta la versión de cinco velocidades (500 S2 V5), siendo este el último modelo comercial fabricado por Sanglas. A principios de los años ochenta, empezó el “boom” y liberalización de las motos japonesas, y Sanglas ya no pudo competir con ellas. Existió también un prototipo monocilíndrico de 750cc, pero por falta de presupuesto nunca vio la luz en el mercado.
La moto que os presentamos en este artículo es la Sanglas 500 S2 y la 500 S2 V5 (5 velocidades), la última versión de la monocilindrica de la casa Sanglas. A continuación puedes leer la prueba de Dennis Noyes publicada en la revista Motociclismo nº 627 y el reportaje de la revista Solo Moto nº 149 de 1978.